15 nov 2007

Coordinadoras de trabajadores

Angela también aportó un comentario al blog el 12 de noviembre del Diario La Tercera. En ese artículo Arturo Martínez, Presidente de la CUT, indica que están creando coordinadoras de trabajadores y que no se encuentran dentro del Código del Trabajo.

La idea es que ustedes se averiguen qué exactamente son estas "Coordinadoras de Trabajadores" y aporten con la información que obtengan.

3 comentarios:

Hugo Barra dijo...

Buenos días, el 31 de Oct.del 2007 el portal www.elmostrador.cl informa que se crea la Coordinadora de trabajadores del Retail, que al igual que la del Cobre, trabajaran en obtener mayores beneficios para sus afiliados.
Adjunto nota y comentarios personales al final de esta.
Hugo Barra R.
Curso 2B IAEPT
U.DE LOS LAGOS
Se crea Coordinadora de Sindicatos de Comercio
Enviado por nemo el Mié, 10/31/2007 - 17:09.
Sindicatos de grandes tiendas se unen para negociaciones colectivas
Fuente: www.elmostrador.cl

Dijeron que a pesar de la expansión a otros países y de las cuantiosas utilidades que reportan cada año estas empresas, los trabajadores no ven reflejadas en sus remuneraciones este crecimiento, al contrario, dijeron “trabajamos más y ganamos menos”.
Unos 25 sindicatos que agrupan a los trabajadores de las tiendas Almacenes París, Ripley y Falabella, que laboran tanto en malls como en el centro de Santiago, se reunieron para constituir la “Coordinadora de Sindicatos de Comercio”, y cuyo objetivo será enfrentar "en conjunto" las negociaciones colectivas que en el mes de noviembre inician estos grupos comerciales con sus trabajadores.
En una declaración emitida por la directiva de esta coordinación, los dirigentes expresaron el descontento por las condiciones laborales y las remuneraciones de este sector de trabajadores, pues según señalaron “los ingresos (de los trabajadores) del comercio son cada año menores y disminuyen con cada cambio que las empresas hacen en los procesos de trabajo”.
La unión de estos sindicatos se produce días antes que se inicie en estas empresas del sector retail, el proceso de negociación colectiva.

COORDINADORA NACIONAL DE TRABAJADORES CONTRATISTAS DEL COBRE
La Coordinadora Nacional de Trabajadores Contratistas se dirige a sus afiliados en las cinco divisiones de Codelco Chile y a la comunidad general para informar lo siguiente:
El viernes primero del presente mes se llevó a cabo una nueva reunión de la mesa de negociación establecida por el gobierno en la que participan además de la Coordinadora, los empresarios contratistas y Codelco Chile.
Como ha sido habitual en reuniones anteriores, Codelco manifestó que el análisis y las soluciones de los problemas que vive el mundo contratista deben verse a nivel de cada división, lo cual fue tajantemente rechazado por la Coordinadora, porque pese a existir
problemas específicos en cada una de ellas, la situación de precariedad que viven los trabajadores es la misma a nivel del conjunto de las divisiones. Y por que, además, la fuerza del movimiento radica en su unidad y no podemos aceptar el intento
de fragmentación que persigue Codelco.
La Coordinadora reiteró como vigente el acuerdo respecto que el plazo para que Codelco se pronuncie sobre las tres demandas básicas, sigue siendo el cinco de junio del presente año. Fecha a partir de la cual la coordinadora convocará a una huelga nacional en caso de no haber logrado acuerdos.
En función de lo anterior y dado el escaso tiempo existente para esa negociación, se resolvió constituir una mesa de trabajo, que sesionará a partir de hoy lunes 04 de junio.
Para lo cual la organización de los trabajadores entregó una propuesta que contempla seis puntos básicos que se enmarcan en nuestra lucha por alcanzar mayores niveles de equidad.

En consecuencia se puede decir que una coordinadora de trabajadores es la unión de sindicatos respecto de un mercado determinado, tales como el cobre, retail, etc., que se unen con el objetivo de enfrentar en conjunto las negociaciones colectivas y desarrollar planes de equidad para sus trabajadores, como por ej. los presentados por la Coordinadora Nacional de trabajadores contratistas del cobre, que dirige a sus afiliados de las 5 divisiones de Codelco Chile, donde solicitan, entre sus puntos mas relevantes:
- Plan básico de salud, para todos los trabajadores contratistas.
- Plan de vivienda, también para todos los trabajadores contratistas.
- Bono de escolaridad, para los hijos de los trabajadores contratistas.
- Nivelación de remuneraciones
- Bono por el aporte fundamental de los trabajadores contratistas al cumplimiento de los objetivos de Codelco.
- Suspensión de despidos y ampliación de contratos de tareas permanentes hasta que termine el proceso de fiscalización de la Dirección del Trabajo, respecto de la aplicación de la ley 20.123 que regula el trabajo en régimen de subcontratación.

Como están las cosas hoy en día, pienso que es posible que también los empresarios se agrupen para negociar en conjunto, y puede llegar a convertirse en un gran referéndum de negociación, que en lo posible beneficie a ambas partes, pues si no, es así, el problema será también de gran envergadura.

Jacob González M. dijo...

En consideración a estos artículos, me parece una buena iniciativa el formar las denominadas "Coordinadoras de trabajadores", cada esfuerzo por lograr un connotado espiritu de equidad en la relación Empleador - Trabajador debe ser potenciado.

Respecto de la opinión de Hugo, creo que el empresario siempre va un paso adelante en estas meterias, lo que significa que estos movimientos sociales siempre han sido previstos, en terminos ideales nunca se logra una completa satisfacción en ambas partes de la negociación. Considero que un referente importante en esta nueva tendencia, es tener una mirada objetiva a aquellos paises desarrollados que han pasado ya por esta etapa, obviamene nuestro realidad empresarial y de Pais tiene matices únicos que hace que no siempre un modelo extranjero sea puesto en practica en forma completa.

Marcela Núñez dijo...

Mi opinión acerca de las Coordinadoras de Trabajadores; estas son asociaciones sin fines de lucro, que agrupan a trabajadores de un mismo sector productivo, por ejemplo: marìtimos, retail, mineros, Servicios Pùblicos, etc. Cuyo objetivo es lograr acuerdos con los empresarios y el gobierno que signifiquen mejoras para sus afiliados.

A continuación adjunto CARTA PÙBLICA DE LA COORDINADORA CAMPESINA DE CHILE enviada a las autoridades del gobierno de nuestro paìs.


La Coordinadora Campesina de Chile, integrada por la Asociación Nacional de Mujeres Rurales e Indígenas (ANAMURI), la Confederación Nacional Sindical Campesina Ranquil, la Confederación Nacional de Federaciones de Sindicatos Campesinos y Trabajadores del Agro de Chile (CONAGRO), la Confederación Nacional de Asociaciones Gremiales y Organizaciones de Pequeños Campesinos de Chile (CONAPROCH) y la Unión Obrero Campesina (UOC), desea expresar a las autoridades del Gobierno de Chile, especialmente a la Presidenta Bachelet, Ministros de Agricultura, Trabajo y Hacienda, a parlamentarios/as y a la sociedad en su conjunto los siguientes planteamientos vinculados a las consecuencias del modelo agroexportador en la dignidad y calidad de vida de más de medio millón de trabajadores y trabajadoras temporales que realizan múltiples faenas en campos y packings del país.

El modelo de producción frutícola orientado a la exportación, se ha basado en el desarrollo de la agroindustria que promueve una agricultura intensiva, que se ha enriquecido a costa de una mano de obra asalariada mal pagada y explotada, y que ha reducido la producción agrícola familiar campesina, generando así un deterioro grave en las condiciones de vida y trabajo de hombres y mujeres del mundo campesino.

Nos parece inaceptable el clima de “terror” que está instalando el sector empresarial en respuesta al movimiento sindical. A través de diversas declaraciones previas al “Cónclave de la Fruta”. El empresariado agroexportador está preparando el camino para presentar un conjunto de exigencias inaceptables. Ello, a pesar que el verdadero “terror” lo viene viviendo desde hace décadas la clase trabajadora. Es cosa de ver los bajos salarios: las y los temporeros están ganando sueldos miserables, en promedio al mes incluso menos que el salario mínimo (la encuesta Casen 2006 señala que el promedio es de $95.076). A ello se suma la informalidad contractual, la falta de condiciones dignas de trabajo, el mal trato laboral y el amedrentamiento a la organización sindical, que viven a diario los y las temporeras de la fruta.
Por lo mismo, nos parece un insulto inaceptable que el empresariado exportador de la fruta hable de la “familia de la fruta”. Ni los trabajadores/as de la fruta, ni los pequeños/as productores/as frutícolas, nos hemos beneficiado de los privilegios que goza el gran empresariado. Por el contrario, el éxito de la agroexportación se basa en nuestra explotación.
Nos parece contradictorio que el empresariado hable de falta de mano de obra, considerando las altas tasas de cesantía que presentan las regiones frutícolas, especialmente en los/las jóvenes y la baja tasa de participación económicamente activa de las mujeres. ¿No será que la aspiración es a encontrar mano de obra barata, más sumisa y vulnerable al abuso, aumentando la cuota de trabajadores/as migrantes que están totalmente desprotegidos por la ley?
El beneficio del crecimiento y éxito exportador que por años ha gozado el sector agroexportador nunca ha llegado a los y las temporeras. Las empresas frutícolas han acumulado capital y riqueza, apoyados por una política de comercio exterior y de fomento productivo generosa y abundante, que nunca han distribuido equitativamente. Es difícil creer que hoy estén pasando por malos momentos, si fuera así sólo demostraría que han sido ineficientes, utilizando argumentos infantiles para recurrir al paternalismo del Estado.
No aceptamos que las empresas se muestren como “víctimas” de la actual coyuntura. Nos preocupa que se vayan a poner más recursos para el sector empresarial en desmedro del gasto social en educación, salud, vivienda y otros beneficios destinados a las y los trabajadores a través de las políticas sociales. También nos preocupa, que se vayan a ver afectados los pocos instrumentos que van dirigidos a la pequeña agricultura campesina.
El Estado debe ser garante primero y antes que todo, de los derechos sociales, económicos y humanos de los trabajadores/as agrícolas y de las y los campesinos. Debemos velar por recuperar derechos, como la negociación colectiva para el sector, que hoy se nos prohíbe, y por ningún motivo retroceder en aquellos alcanzados gracias a la dura lucha sindical y social. La legislación laboral no puede “adaptarse a las características de la fruticultura” ni flexibilizar aún más las jornadas de trabajo. Los/as legisladores deben contribuir a la equidad y justicia social.
Por estas razones nuestras demandas históricas han sido y seguirán siendo:
• Trabajo y salarios dignos:
o Jornadas de ocho horas. Pago de horas extraordinarias y no más de dos horas extras al día
o Derecho al descanso
o Comedores y baños dignos. Agua potable para las y los trabajadores
o Salarios sobre el mínimo
o Protección efectiva contra plaguicidas
o Mantención efectiva de las actuales edades de jubilación para hombres y mujeres
• No a la subcontratación porque ampara el abuso y la irresponsabilidad patronal. Contrato directo
• Mayor protección social, pues se nos paga de manera temporal, pero se nos ponen las exigencias del trabajo permanente para poder acceder a la pensión mínima garantizada.
• No a la persecución sindical, pues se nos conculca día a día nuestros derechos por la vía de los hechos y es generalizada la práctica de las listas “negras”.
• Mayor fiscalización y cumplimiento de las leyes. Término a los vicios del sistema fiscalizador y de cobro de multas.
• Pago obligatorio de la previsión social. Fin al truco de declarar sin pagar.
• Apoyo a la pequeña agricultura campesina, a través de políticas diferenciadas, sostenidas y accesibles. Ello debe incluir medidas prontas especiales, para enfrentar los efectos de las heladas en la actual temporada, sin que ello signifique nuevo endeudamiento.
Cada año el milagro económico exportador de la agricultura chilena se alimenta de la muerte, enfermedad o invalidez de muchos de nuestros compañeros y compañeras, y de la desaparición de los pequeños/as agricultores/as. Por la estabilidad política, social y económica del país, demandamos ser escuchados. Por el bien de los trabajadores, verdaderos artífices de la riqueza que genera este sector, y de los pequeños productores que alimentan al país, exigimos equidad y justicia social.